Las tuercas son elementos de fijación que se utilizan para unir dos piezas mediante un tornillo. Son piezas pequeñas y circulares con una rosca interna que se ajusta a la rosca del tornillo. Las tuercas se utilizan en una amplia variedad de aplicaciones, desde la construcción de maquinaria hasta la reparación de electrodomésticos.
Las tuercas se utilizan para fijar y asegurar tornillos y otros elementos de fijación en su lugar, y su nombre proviene del latín «torquere», que significa «torcer».
Tipos de tuercas
Los tipos de tuercas son variados y cada uno tiene una función específica. Desde las tuercas hexagonales hasta las de mariposa, explicaremos las diferencias entre cada una de ellas.
1. Tuerca hexagonal: Es la más común y se utiliza en una gran variedad de aplicaciones. Tiene seis lados y se ajusta con una llave inglesa o una llave de tubo.
2. Tuerca de mariposa: Tiene dos alas que permiten ajustarla a mano sin necesidad de herramientas. Se utiliza en aplicaciones donde se necesita un ajuste rápido y fácil.
3. Tuerca de seguridad: Tiene un diseño especial que evita que se afloje accidentalmente. Se utiliza en aplicaciones donde la vibración o el movimiento pueden aflojar la tuerca.
4. Tuerca de remache: Se utiliza para fijar piezas a través de un agujero. Se inserta en el agujero y se aprieta para que se expanda y se fije en su lugar.
5. Tuerca de ojo: Tiene un ojal en la parte superior que permite sujetarla con un gancho o un cable. Se utiliza en aplicaciones donde se necesita una conexión segura y resistente.
6. Tuerca de brida: Tiene una brida en la parte inferior que se utiliza para fijar la tuerca en su lugar. Se utiliza en aplicaciones donde se necesita una conexión segura y resistente.
7. Tuerca de acoplamiento: Se utiliza para unir dos piezas roscadas. Tiene una rosca interna y otra externa que se ajustan a las piezas que se quieren unir.
8. Tuerca de expansión: Se utiliza para fijar piezas en superficies irregulares o huecas. Tiene un diseño especial que se expande para fijarse en su lugar.